12 Fachadas perfectas para la privacidad

La fachada de una casa está determinada no sólo por el nivel de privacidad que busca el cliente, también por la orientación que tiene y las condiciones climáticas del lugar. En este caso se diseñó una fachada casi totalmente cerrada, las ventanas pequeñas tienen aberturas horizontales que le dan una armonía al diseño liberándolo de la sobriedad, mucho blanco y verde en el frente le terminan de dar el toque de vida a la fachada.

Si quiero privacidad ¿me tengo que privar de las ventanas? ¡no! En esta casa podemos ver cómo se conjugan a la perfección la privacidad y las ventajas de tener ventanas y, por lo tanto, iluminación natural. Podemos ver cómo la cubierta superior de la casa mantiene las ventanas del segundo piso protegidas. De la misma manera las otras ventanas más chicas están cubiertas por plantas, lo cual no sólo lo resguarda de las miradas ajenas sino que a los habitantes de la casa les brinda una vista natural.

Un gran cubo que enmarca la única abertura y acceso a la casa no pasa desapercibido y, al mismo tiempo, preserva la intimidad. El gran ventanal suaviza el diseño y gracias a las cortinas nada de lo que sucede adentro se ve en el exterior. Un diseño simple que aprovecha las ventajas del lugar donde está emplazado gracias al gran ventanal, sin embargo con una fachada hermética que se distingue por su elegancia. Esta gran creación pertenece a Vismaracorsi Arquitectos.

En este caso contamos con una fachada que optó por dos estructuras ciegas que, a pesar de su simpleza, supo destacarlas gracias a la elección de diferentes materiales y tonos para ambas. Un estilo que inspira firmeza, seguridad y carácter suavizado gracias a los rectángulos en el bloque inferior.

A pesar de su fachada ciega, en la cara posterior sus balcones aprovechan la ubicación y logran captar luz solar.

En este caso vemos una excelente fachada que no se priva de nada, grandes ventanales con un sistema de protección solar que no sólo aprovecha o protege de la luz del sol, sino también de las miradas de los más curiosos. Estos sistemas son uno de los más utilizados y convenientes cuando tenemos fachadas con orientación norte en donde podemos aprovechar la luz solar cuando queramos.

De nuevo, una fachada totalmente cerrada pero con un diseño tan dinámico que ni nos damos cuenta que no tiene ventanas. Esta fachada optó por resguardar totalmente la intimidad de los habitantes con un diseño vivo que combina materiales y colores de una manera que llama la atención y se aleja del hermetismo visual. La puerta y el portón de hierro negro en perfecta armonía con la pared central de piedras marca un estilo moderno para la fachada y, como si esto fuera poco, el pequeño jardín delantero le da la vida y frescura suplantando las ventanas.

Una fachada que con su privacidad y todo no se priva del estilo. La combinación de planos y materiales le da dinamismo a esta casa que mantiene su intimidad resguardada. Esta casa con un estilo discreto pero moderno supo aprovechar la arquitectura para generar una fachada que si bien no muestra mucho del interior brinda un exterior elegante y conectado gracias a la pequeña ventana y el balcón en la terraza.

Otro ejemplo de una fachada ciega que sin embargo aprovecha la iluminación natural, en este caso en un ventanal vertical en la zona de las escaleras, ideal para iluminar ese espacio interior. El resto de la fachada si bien no cuenta con ventanas posee una estructura que gracias a sus diferentes planos brinda la sensación de una fachada abierta, y el toque de calidez está dado por las maderas que junto a las paredes blancas se transforman en una gran combinación.

Una fachada que se destaca por su simpleza, su privacidad hacia el interior pero principalmente por lograr esto con mucho estilo gracias a la utilización de materiales que rompen la monotonía de los bloques. La celosía metálica que lleva el mismo color de la pared blanca nos da la sensación de ligereza, al igual que las diagonales muy bien utilizadas en este caso.

Las fachadas de las casas nos dicen muchas cosas, en este caso además de darnos una sensación de que no podemos conocer nada de la intimidad de sus habitantes, nos da la sensación de fortaleza y estabilidad. De vuelta vemos cómo la combinación de la madera le otorga calidez a una fachada que puede llegar a parecer muy fría si no fuera por estos tonos y materiales.

En este caso vemos cómo una fachada cuida la privacidad pero como consecuencia de su ubicación y el pleno contacto con la luz solar, dependiendo de la región en que se encuentre muchas veces una fachada que proteja el interior del calor es necesario. En este caso no se privó de los beneficios de un balcón en el dormitorio, pero resguardando del calor. El resto de las fachadas son cerradas casi en su totalidad.

En esta fachada vemos cómo se aprovecharon pequeñas ventanas en los muros que permiten el ingreso de luz natural pero su ubicación estratégica hacen que estén fuera del alcance de las miradas ajenas, priorizando de este modo la privacidad de la casa. La combinación de piedra y blanco le da un estilo moderno que, acompañado por la arquitectura, la fachada, si bien cerrada, no pierde encanto.

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