Sobresaliente metamorfosis en una casa muy vieja

Marisa Alcore Marisa Alcore
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A través de este libro de ideas conocemos un poco más de nuestro país vecino: ¡Portugal! Sus paisajes, su gente, su patrimonio histórico, su cultura y su gastronomía inspiran a muchas personas, como a los profesionales de Uma Casa Portuguesa, quienes desarrollaron este increíble proyecto a partir de una casita vieja. 

Su principal objetivo es promover, divulgar y dinamizar el turismo en Portugal a través de la creación de diferentes unidades de alojamiento temporal. Contando con el apoyo de más de 100 marcas portuguesas, esta empresa pretende mostrar la calidad e innovación que les caracterizan, haciendo uso de estos en todos sus proyectos. 

Conocemos uno de ellos a través de la siguiente selección de fotografías. 

Un objetivo a perseguir

El objetivo principal de Uma casa portuguesa es rehabilitar y reformar viejas construcciones, convirtiéndolas en alojamientos turísticos modernos y acogedores. Pero la clave está en el cómo, y es que no se trata de meros apartamentos de alquiler. Los clientes experimentan una estancia tradicional y típica portuguesa, garantizada a través del uso de productos exclusivamente autóctonos. A través de esto, los turistas consiguen adentrarse de pleno en la propia cultura, y tener una visión real de este país. 

Esta vieja casa en esquina fue una de las construcciones que estos profesionales decidieron reformar y transformar en lo que a continuación veremos. 

Localización

Pero además de la calidad de sus proyectos, otro de los puntos fuertes de esta empresa es la localización de sus viviendas en alquiler. Esta concretamente se encuentra cerca del río en Lisboa: capital de Portugal y una de las ciudades más bellas del mundo. 

En esta fotografía ya observamos cómo se comenzaron los trabajos de rehabilitación, restaurando las fachadas y la cubierta para que este pequeño edificio fuera de nuevo funcional y estéticamente atractivo. 

En el interior

Si hay algo que no puede faltar en una casa tradicional portuguesa es el azulejo. En el interior de esta se quiso utilizar este recurso, pero en un contexto más moderno, de ahí el original pavimento empleado en el área de la cocina. Además, su aplicación permitió que esta estancia abierta se diferenciara del resto del espacio. A través de los colores se consigue dar continuidad a los materiales y tonos del mobiliario fijo. La modernidad y la tradición se entremezclan, sin dejar a un lado la funcionalidad. 

Unas escaleras únicas

Las casas antiguas tienen un encanto innato, sin embargo, a la hora de reformarlas una de las principales preocupaciones es la falta de espacio para efectuar pequeñas intervenciones interiores de rehabilitación. Antes, las habitaciones eran más pequeñas, y es que las casas estaban más compartimentadas siguiendo el lema de: cuánto mayor sea el número de espacios independientes, mejor. Cantidad pesaba más que calidad. 

Precisamente esto ocurría en el elemento de comunicación vertical de la casa. Las escaleras se encontraban encajonadas y con un diseño carente de belleza. Para resolver este problema, los arquitectos estudiaron el caso a fondo, y dieron con este modelo de peldaños compensados. Su materialidad en madera consigue darle un aire más tradicional a estas modernas escaleras. 

Amarillo de Lisboa

En esta última fotografía mostramos uno de los dormitorios, situados en la planta superior. Sin duda, se trata de un espacio moderno y sencillo, donde se han querido incluir las piezas de mobiliario indispensables para no saturar el ambiente. El protagonismo se cede a la pared principal, pintada de amarillo, color característico de esta ciudad. 

Hasta aquí el recorrido por este espectacular proyecto portugués. Si quieres conocer otros fabulosos antes y después, te recomendamos: 

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