¿Pretendemos que el salón sea el rincón favorito de la casa, pero tenemos poco presupuesto? No hace falta realizar grandes inversiones si lo que sobran son ganas de cambiar las cosas, un poco de paciencia para rastrear muebles y accesorios, y un poco de apertura para probar nuevas ideas.
Aquí proponemos diversas ideas para que la decoración de un salón no sea demasiado onerosa. Se trata, a grandes rasgos, de conocer las necesidades y los gustos propios, de buscar comercios con buenos precios, recorrer grandes superficies dedicadas a la decoración y el mobiliario, visitar tiendas de segunda mano y mercadillos, y de animarse a usar muebles que se alejan de nuestro estilo tradicional. Puede que nos encontremos con agradables sorpresas para que el salón sea un lugar donde las visitas perciban lo mejor de nuestra personalidad.